Beneficios de los espacios verdes naturales sobre la salud de los niños
Investigadores del INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, de la Argentina), la Universidad de Buenos Aires (UBA: Cátedra de Farmacobotánica, Facultad de Farmacia y Bioquímica) y del Hospital de Pediatría Garrahan de la Ciudad de Buenos Aires, al indagar cómo influyen en la salud y relevar las especies vegetales existentes en los jardines, destacan el impacto positivo de los mismos sobre pacientes, sus familias y el personal de atención médica.
Bajo el principio de que el contacto con espacios verdes naturales tiene un efecto físico, mental y social favorable para las personas, investigadores del INTA Castelar, la UBA y del Hospital de Pediatría Garrahan, se propusieron conocer las especies vegetales de los jardines, pero especialmente, revisar el estado del conocimiento acerca de los beneficios para la salud de pacientes internados.
Tras cuatro años de trabajo -2013 a 2016- en el establecimiento de alta complejidad y de referencia para toda la Argentina y la Región, afirman que el contacto de las personas con los ambientes naturales reviste, por sus efectos beneficiosos, una importancia fundamental para la salud de los pacientes y sus familias.
El contacto de las personas con los ambientes naturales, por sus efectos beneficiosos, es de una importancia fundamental para la salud de los pacientes y sus familias.
“Entendemos que la medicina puede tener un sentido más amplio e integrador que lo que puede verse cuando se entra a un hospital”, admite Paulo Cáceres Guido, farmacéutico e integrante del Grupo de Medicina Integradora del Hospital Garrahan quien coordinó la investigación.
El objetivo fundamental del trabajo fue el de la concientización respecto de la importancia de los espacios verdes naturales, porque además “el hospital fue concebido con la idea de que existieran estos espacios y no solo construcciones materiales”, explica Cáceres Guido. Para esto se realizó un relevamiento taxonómico detallado de las 69 especies de plantas de los espacios verdes naturales del hospital, clasificadas en herbáceas (14), arbustos (20) y árboles (35).
“El trabajo constituye un primer paso que, junto a un plan estratégico que se sustenta en la interacción de las personas con la naturaleza, puede contribuir a mejorar la sensación de bienestar y la salud de los pacientes, de los acompañantes y del personal sanitario”, afirma Cáceres Guido.
“La exposición de los niños a los espacios verdes es positiva”, sostiene Hernán Bach, del Instituto de Recursos Biológicos (IRB) del INTA Castelar y docente de la facultad de Farmacia y Bioquímica de la UBA. Su afirmación es coincidente con la evidencia científica que lo demuestra, y va de la mano del resurgimiento de la presencia de jardines en centros de atención de salud. Este fue un motivo más para avanzar en un relevamiento taxonómico de las especies de plantas sobre los 30.000 m2 que comprenden los patios externos e internos del Hospital Garrahan.
La conclusión a la que llegaron fortalece el concepto de que la presencia de estos espacios verdes son importantes, a la vez que también pueden ser utilizados en terapia ocupacional hortícola, a través de la instalación de huertas demostrativas o de viveros como proveedores de plantas para la reposición, lo que podrían integrar a pacientes en contacto directo con la naturaleza.
Salud y jardines
En un artículo científico original que fue publicado este año en la Revista Archivos Argentinos de Pediatría, perteneciente a la Sociedad Argentina de Pediatría, el equipo de investigación hace también una revisión actualizada sobre la evidencia que demuestra que un contacto adecuado con la naturaleza puede proporcionar beneficios restaurativos que, a largo plazo, se acumulan y generan motivación por el compromiso, por la toma de riesgo, por la curiosidad y la creatividad, entre otros beneficios.
“Las experiencias en este tipo de ambientes son limitadas en el país”, asegura Bach, autor del trabajo junto a Cáceres Guido, Ziomara Balbarrey, del Grupo de Medicina Integradora del Hospital Garrahan, Beatriz Varela y Marcelo Wagner, integrantes de la Cátedra de Farmacobotánica de la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la UBA.
El grupo pone en evidencia la importancia que revisten los espacios verdes para los pacientes que asisten por terapias ambulatorias, complejas o crónicas, de acuerdo con las modernas concepciones de interrelación ambiente-paciente.
Durante el relevamiento taxonómico “los ejemplares de todas las especies fueron acondicionados y depositados en el herbario de la Facultad de Farmacia y Bioquímica como de plantas cultivadas del INTA”, señala Hernán Bach.
Por delante queda la tarea de señalar con ilustraciones botánicas e información los pasillos que dan a los jardines internos y externos del hospital, para que los pacientes y acompañantes puedan conocer los nombres vulgares y científicos de las distintas especies, así como también algunas de sus características más relevantes.
Por último, cabe destacar que el Hospital Garrahan, inaugurado en 1987, pertenece a la Red Global de Hospitales Verdes y Saludables, una iniciativa mundial que es parte del movimiento Salud sin Daño (Health Care Without Harm) y tiene por objeto apoyar los esfuerzos existentes para promover una mayor sustentabilidad y salud ambiental en el medio sanitario, y fortalecer los sistemas de salud a nivel mundial.
Fuentes originales:
INTA Argentina: http://ria.inta.gob.ar/contenido/hospital-garrahan-estudian-beneficios-de-los-espacios-verdes-en-ninos
Archivos Argentinos de Pediatría: http://www.sap.org.ar/docs/publicaciones/archivosarg/2018/v116n2a22.pdf